Reconstrucción mamaria
Hoy en día, el cáncer de mama sigue siendo el tipo de tumor más habitual entre las mujeres de nuestra sociedad.
Su tratamiento conlleva con frecuencia la mastectomía o extirpación de la mama, con la consecuente pérdida de un seno para la mujer que la padece.
No sólo restituye un órgano perdido, sino que también ayuda a recobrar la feminidad, la propia imagen, el equilibrio psicológico y contribuye a atenuar la conmoción que supuso la lucha contra el cáncer.

La reconstrucción mamaria es un paso esencial hacia la normalidad.
Preoperatorio
Como en toda intervención quirúrgica, se requiere un examen preoperatorio del paciente para detectar cualquier posible anomalía que pudiera contraindicar la operación.
Anestesia
La intervención se realiza bajo anestesia general.
Procedimiento quirúrgico
Cirugía de perforantes / técnica diep
DIEP es la forma habitual de nombrar la técnica más novedosa de reconstrucción mamaria.
Emplea únicamente la piel y grasa del abdomen, sin destruir ningún músculo y sin utilizar ningún material extraño para el cuerpo (implantes mamarios).
El objetivo del cirujano plástico es crear un nuevo pecho lo más parecido posible a una mama natural.
Este procedimiento no interfiere ni en el tratamiento, ni en el control posterior del cáncer de mama. Prueba de ello es que cada día son más los oncólogos que lo recomiendan.
Los resultados obtenidos con este tipo de cirugía son del todo satisfactorios. El DIEP permite una reconstrucción mamaria de gran calidad. El resultado es natural y definitivo.
La nueva mama tiene el mismo tacto, forma y evolución que la natural, lo que contribuye a recuperar el equilibrio físico y psíquico que desafortunadamente conlleva la mastectomía como tratamiento del cáncer de mama.
Se trata de una intervención microquirúrgica. Los cirujanos que la realizan requieren de lupas y microscopio para realizar las suturas de los vasos que han de comunicar para que los tejidos que van a constituir la nueva mama tengan la circulación necesaria para sobrevivir.
Este tipo de intervención que tiene una duración de 6 horas como mínimo.
Método expansor tisular
El método de expansión tisular consiste en la colocación transitoria de un implante con capacidad para dilatarse al ser llenado paulatinamente con líquido.
Esta expansión permitirá, a lo largo del tiempo, crear un exceso de piel al nivel de la zona donde antes estaba la mama, de manera que nos permitirá, en una segunda intervención, colocar una prótesis mamaria estándar (de gel de silicona) para recrear la forma del seno original.
Pasados unos meses, deberá realizarse una tercera intervención con anestesia local para la reconstrucción de la areola y del pezón.
Colgajo de dorsal ancho
La carencia de piel tras la mastectomía se repone mediante la movilización de piel del dorso de la mujer al pecho a través de un túnel cutáneo a nivel de la axila.
Para conseguir que esta piel de la espalda sobreviva, movilizamos también el músculo que se encuentra inmediatamente subyacente y que aporta vasos sanguíneos nutrientes a esa piel. Ese músculo recibe el nombre médico de dorsal ancho.
La intervención se realiza en un solo tiempo quirúrgico y suele durar entre 2 y 3 horas. Se utiliza un músculo que en condiciones normales puede resultar prescindible. La cicatriz de la espalda se sitúa a una altura donde es fácilmente cubierta por el sujetador o por el bañador.
Hospitalización
En general se recomiendan 1 o 2 días de hospitalización.
Cuidados posteriores
Cirugía de perforantes / técnica diep
En este tipo de reconstrucción, el postoperatorio es más llevadero ya que al ser un colgajo no muscular la recuperación es más rápida.
El dolor postoperatorio (similar al de una cesárea), se puede atenuar con los calmantes habituales.
Es recomendable llevar una faja abdominal y un sujetador deportivo durante 2 o 3 semanas para conseguir una buena cicatrización.